martes, 6 de abril de 2010

Samantha

Samantha se metería en la madriguera, sin pararse a considerar cómo se las arreglaría después para salir. Al principio, la madriguera del conejo se extendía en línea recta como un túnel, y después torció bruscamente hacia abajo, tan bruscamente que ella no tuvo siquiera tiempo de pensar en detenerse y se encontró cayendo por lo que parecía un pozo muy profundo. El pozo era en verdad profundo, o ella caía muy despacio, porque mientras descendía, tuvo tiempo sobrado para mirar a su alrededor y para preguntarse qué iba a suceder después de todo lo que le había ocurrido. Primero, intentó mirar hacia abajo y ver a dónde iría a parar, pero estaba todo demasiado oscuro para distinguir nada.

¡Vaya! Pensó Samantha. ¡Después de una caída como ésta, rodar por las escaleras me parecerá algo sin importancia! ¡Qué valiente me encontrarán todos! ¡Ya en estos momentos ni siquiera lloraría, aunque me cayera del tejado
-Me gustaría saber cuántas millas he descendido ya -dijo en voz alta-.
-¡A lo mejor caigo a través de toda la tierra! ¡Qué divertido sería salir donde vive esta gente que anda cabeza abajo! Los antipáticos, creo... tendré que preguntarles el nombre del país. De pronto, ¡cataplum! Samantha fue a dar sobre un montón de ramas y hojas secas. La caída finalmente había terminado se levantó de un salto y encontró un letrero que decía “Samantha en el país de las maravillas”.

Quizás para el rodaje de esta nueva película, Tim Burton le aconsejará a ella inventar una Samantha que conservará, a lo largo de los años, el mismo corazón sencillo y entusiasta de su niñez, y que reuniría a su alrededor a otros chiquillos, y hará brillar los ojos de los pequeños al contarles un cuento extraño, quizás este mismo sueño del País de las Maravillas que había tenido años atrás; Samantha sentirá las pequeñas tristezas y grandes alegrías al recordar su propia juventud.

Tim Burton Además le advertirá que en la vida se encontrará con conejos blancos a quienes seguirá locamente, y su persecución la desembocará en aventuras y descubrimientos, también podrá dar con algunos sombreros locos con quienes tomará “algunas meriendas locas”, aparecerán y desaparecerán otras personas parecidas al gato de Cheshire y no faltarán además unas cuantas Reinas o Reyes de corazones de muy mal genio y rápidos para sentenciar a quien ose ofenderlos mínimamente. Pero, ella aprenderá a manejar rápidamente a estos personajes dentro de la película porque estos solo hicieron parte de “Samantha en el país de las pesadillas” y ella no debe permitir que nadie ni nada entorpezca su nuevo rodaje. Rodaje que ha comprendido a "la lujuria como enriquecimiento de la vida".

1 comentario:

  1. Esto se complica un poco, el camino entonces es el de la lujuria, bien, ése tal vez sea el real camino que tome Samantha, ahora el problema es cuándo querrá salir de ese guión del que hace parte ahora, porque en el momento en que vuelva a la realidad qué va a suceder. Se me hace que podrías retomar ahora sí el encuentro con Gabriel a ver también cuál sería su actitud después de encontrarlo y tomar esta decisión.

    ResponderEliminar